viernes, 21 de mayo de 2010

Grandes cumpleaños, grandes momentos.-

En la noche del 30 de Abril, madrugada del día 1 de Mayo, nuestro amigo V. A. V. nos ha invitado a su cumpleaños. Lo normal es que yo, en cierta manera he estado cerrado en cuanto a la visión de lo que puede ser de divertida la noche, cometiendo el error de no dejar fluir las circunstancias, y disfrutar de lo que pueda pasar. Además, y supongo que como a muchos nos pasa, cuando no tenemos dinero porque todavía no hemos cobrado, salir sin “pasta”, preferimos evitarlo.

Pero es el cumpleaños de Víctor, al que siempre he apreciado, al que tengo un gran cariño, y al que quiero como uno de los buenos y nobles amigos. Alguien que siempre te va a extender la mano, aunque él tb se este hundiendo contigo.

Por ello, algo que al acudir a la reunión daba por hecho, pero que tengo que exponer aquí (¿?), decidí una sola cosa: “lo que quiera mi amigo V. A.”. No sabía donde cenaríamos, no sabía donde iríamos luego, y no sabía que me enseñaría Víctor, pero me he dejado llevar al contrario de lo que he hecho siempre. V. aparte de recogerme junto con Pablo y Manuel en la puerta de mi trabajo, nos llevo a sus amigos M., Montalvo., P., E., J., y a mi, al local más cutre por fuera de todo Madrid. Hay que dejar claro que en el lugar más cutre estéticamente, suelen ser los lugares donde mejor se come.

Efectivamente, nuestro amigo eligió el mejor de los lugares. Una jarra de cerveza que hemos consumido entre Montalvo y yo, y tres jarras de sangría para el resto, aparte de varias raciones abundantes de chipirones, pulpo a la gallega, morcilla, croquetas, patatas bravas, alitas de pollo, mollejas y lacón. Después un café o/y carajillo, y una copa por mi parte, mientras el resto solo copa. Después, un mojito en un pub del barrio de “Guzmán el Bueno”. Montalvo por responsabilidades laborales se ha ido a casa. Y por ultimo, y esto a cuenta propia hemos ido a la discoteca de la que no recuerdo el nombre, donde se ha quedado J., ligando como siempre.

No sabía que iba a pasar, donde íbamos a ir, qué íbamos a ver, y he disfrutado cuanto más mejor, y de los mejor, lo superior. Creo que hacia tiempo que no me lo pasaba tan bien, que no me cogía una buena “pelotada”, y que no pasaba con mis mejores amigos un momento tan agradable.

-Pero después… ¿Qué ocurrió?

¿Después? No lo se, no tengo moral para expresar lo que prefiero no recordar y actuar en consecuencia. Las discusiones entre amigos nunca fueron buenas, cuando ninguno cede.

Por ello la consecuencia es, que recordare este cumpleaños, esta aventura y esta agradable reunión como una de las cosas buenas que he disfrutado con mis amigos. Como un gran acto de un amigo que deseaba compartir su cumpleaños con nosotros por el simple disfrute de la personalidad de cada amigo.



Cienfuegos. Por dejar constancia de un buen recuerdo.

PD. En esta noche de reunión, de encuentros, y de fiesta, aunque yo trabaje a las 15:00 horas de este día 1 de Mayo, y que seguramente no dormiré por peligro de quedarme dormido, Emilio y yo Cienfuegos, volvemos a casa en autobús, tras andar desde “Preciados” hasta “Príncipe Pío”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario