martes, 17 de agosto de 2010

El Sarcasmo.-

Veamos lo que dice el Diccionario de la lengua española © 2005 Espasa-Calpe:

Sarcasmo:
1.- Burla o ironía mordaz, hiriente y humillante:
(Ejemplo: me hizo mucho daño con sus sarcasmos).

2.- Figura retórica que consiste en emplear esta ironía o burla.

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¿Y qué diferencia existe entre el sarcasmo y la ironía?
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Diccionario de la lengua española © 2005 Espasa-Calpe:

Ironía:
1.- Burla sutil y disimulada:
(Ejemplo: hablaba con ironía cuando dijo que mi trabajo era muy interesante).

2.- Figura retórica que consiste en dar a entender lo contrario de lo que se expresa.

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Teniendo estos dos significados claros, que la Ironía es una burla sutil y disimulada, tb he de añadir que la ironía es una forma divertida de realizar una tarea, a la hora de dar a entender lo contrario de lo que se expresa, para hacer de la situación amena. El sarcasmo, por el contrario, puede actuar como el significado de ironía, pero fundamentalmente actúa como burla mordaz, hiriente y humillante.

La ironía puede ser utilizada para divertir, el sarcasmo no, pues suelen ser ataques directos a las opiniones, percepciones, o acciones contrarias a quien expresa el sarcasmo. El sarcasmo, como muy bien expresa la RAE (Real Academia Española), tiene el objetivo de herir y humillar.

Creo que cualquier opinión o percepción es igual de Digna aunque ambas se contra pongan. Creo que ambas versiones contrapuestas, tienen el mismo Derecho de expresarse, y aunque una se acerque más a la Verdad, no por ello la más alejada, debe verse obligado a recibir del primero, la humillación o ataque hiriente alguno.

Creo que utilizar el sarcasmo para defender una opinión propia, se debe a que el propia diálogo no ha funcionado a la hora de intentar convencer al contrario. Cuando no se puede convencer al contrario, se suele recurrir al sarcasmo, o a ironizar sobre las opiniones contrarias de forma hiriente y humillante.

Pero el problema más grave, viene cuando se observa por qué al no poder convencer al contrario, se utiliza el sarcasmo, en vez de intentar encontrar otras palabras distintas para defender las ideas propias e intentar convencer.

Normalmente en estos momentos, la decisión de buscar nuevas ideas, o utilizar el sarcasmo, se debe a que quien lo utiliza se cree en posesión de la Verdad (aun que se acerque a ella o este más lejos que la otra), le es muy fácil humillarla o atacarla de forma mordaz e hiriente. Al no poder hacer entender la opinión propia, se intenta imponer “esa verdad” u opinión al otro. Por esto mismo es más fácil sacar el sarcasmo, en vez de esforzarse en intentar convencer.

Es como decir: -Mira, como eres tonto por pensar así, y no como yo que tengo la verdad, además me voy a reír de ti-

Asoc. De Cienfuegos:
-Pero estas opiniones pueden deberse a tu sentimiento de agravio, por la conversación con el Dr. Orestes esta mañana, ¿no crees?-

Cienfuegos:
-Podría verse de esa manera, -no por ello has entendido hacer el pino (ironía)-, pero creo que Ahora, en vez de hace dos o tres años, ahora no sirve tu opinión, y sin utilizar sarcasmo, pero sí ironía, intentare convencerte.

Lo que no me gusta, no es la opinión de Orestes, -que tiene tanto derecho a existir y expresarse como la mía-, sino la utilización del sarcasmo como último recurso de imposición.

Durante mucho tiempo, estuve experimentando en el hogar el sarcasmo constante y sonante, no solo cuando hacia aquellas cosas no esperadas, sino cuando no hacía lo que se me decía, cuando no pensaba como debía, cuando no actuaba como se esperaba, cuando pensaba contrario a una opinión contraria, cuando hablaba sin decir lo que debería decir, o cuando la educación paternal fue tan ínfima, impositiva y sarcástica, que las ideas, y pensamientos habían dejado de existir, o carecía de toda lógica.

Por otro lado, Ahora, en una discusión, -pensando-, intento ver la lógica de los dos puntos. Mi amigo Orestes no se equivocaba en su percepción y planteamiento del problema, pero yo tampoco, porque ambas opiniones tienen el mismo Derecho a existir y ser Expresadas. En ningún momento le dije a Orestes que mi opinión estaba sobre la suya, y que esta era la verdad, por el contrario pretendía posponer la conversación, para poder convencer, o por el contrario admitir la culpa del error y actuar en consecuencia.

Como el Dr. Orestes no ha conseguido convencerme de su percepción por la lógica, -a mi parecer-, en posesión de la Verdad, -más cerca de la Verdad, pero pudiendo confundirse-, al no atender yo a unas razones que no eran tales para mi percepción, en vez de intentar convencerme de otra manera, o dejarlo para la conversación de la noche, ha preferido ser sarcástico y por ende hiriente.

Creo por tanto, con cierta experiencia, que mis opiniones iniciales en este texto sobre el sarcasmo son correctas. La polémica –la cual, no es tal-, creada por no poder convencer y por un sarcasmo, ha dado como resultado en esta ecuación con la ayuda del Sr. García, a comprobar que mi percepción en el asunto era errónea, -no por ser expresada y existir-, sino por un mal entendimiento de mi propia percepción.

El que el Señor Orestes, estuviese más cerca con sus opiniones de esa Verdad que ostentaba cuando lo del sarcasmo, ello no le da derecho a utilizar ese sarcasmo, que es lo que yo quiero expresar aquí, debido a lo que en sí mismo es el sarcasmo; como despreciable.

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Cienfuegos.

Descubriendo aquello que pasamos desapercibido por nuestra Conciencia.-

Los amigos están para disfrutar de lo bueno de nuestra vida con ellos, para disfrutar lo bueno de sus vidas con nosotros, pero a veces los amigos, están ante nosotros para llamarnos la atención, para hacernos entrar en razón sobre un asunto, para hacernos ver la realidad de algo, para intentar convencernos y dialogar sobre las opiniones de cada uno.

Los amigos conocen lo bueno de cada uno, lo malo tb lo conocen, e incluso conocen aquellas cosas, recuerdos, o sentimientos con los que pueden destrozarnos psicológica o moralmente. De la misma manera que en los amigos depositamos todas nuestras confianzas para no utilizar esas informaciones con el objetivo claro de dañarnos. Los amigos saben como hacernos felices, y viceversa, sabemos con qué sonríen, y con que sus energías vibran de Dicha, pero los amigos tb son la PiedraPómez con la que nuestra propia personalidad ha de pulirse.

La única manera de pulir la personalidad de forma correcta, es saber cuando los amigos te están puliendo con Amor y cuando para hacer daño. A veces la intención de un amigo, es el intentar pulirte (hacerte ser mejor persona), pero las formas o las palabras que se utilicen para Despertar tu Conciencia, creo, nunca han de ser con desprecio, imposición, o sarcasmo.

PD.

-Sr. Asoc. ¿Qué hubiese hecho, aprendido o no habría pulido en mi personalidad, sin no hubiese conocido al Sr. Orestes?

A 17 de Agosto de 2010.-

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