Serenidad y Silencio.

Es curioso porque todo aquello de lo que considero importante y entretenido actualmente, ya he hablado muchas veces sobre ello, y de formas muy distintas.

A veces algo nos cambia por completo y nos damos cuenta de que las palabras, -por mucho que se repitan-, no causan un cambio mayor o más rápido; por el contrario, se tienden a aborrecer.

Ya no se trata tanto de contar o de avisar, como de actuar y ser.

Ya no se trata tanto de explicar o de hacer a otros conscientes de su realidad y Concientes de lo que no ven; como es el hecho de Confiar en uno mismo y en sí mismo, y de ser consecuente con las acciones tomadas.

Cuando en una presa hay una grieta silenciosa, el atento puede decir –Peligro, hay una grieta-. Cuando se produce una grieta perturbadora en la presa, el lento dirá –Correr, se rompe la presa-. Pero los Dormidos, quienes no son conscientes de su entorno ni Concientes de su realidad, o aquellos que no conocen los bordes de su Ilusión; son los que no oirán caer el agua sobre sus cabezas y dudo que alguno sepa que se está ahogando.

(Escrito a día 18 de Agosto de 2014 d. C).

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Cienfuegos a día 21 de Agosto de 2014d. C.